Me regala mi padre algunos ejemplares de la revista Artes de México del olímpico año 68. “Porque tienes gusto por estas cosas”.
El primero que hojeo, con sumo cuidado, es un tabloide impreso en papel couché de alto gramaje, de cubierta brillante: El juguete mexicano. El contenido, indica la portada, viene traducido a cuatro idiomas.