Lee Génesis 27:1–46
¿Alguna vez has tenido un plan que te salió espectacularmente mal? Cuando estaba en la escuela secundaria, mis compañeros y yo tratamos de convencer a nuestra profesora de historia que pospusiera un examen que teníamos programado. Ella respondió a nuestro intento de manipulación haciéndonos el examen de inmediato.
El hogar de Isaac y Rebeca quedó fracturado por el favoritismo. La preferencia de Isaac por Esaú y la de Rebeca por Jacob tendría consecuencias que durarían generaciones. En Génesis 27, Isaac se había debilitado y quería poner sus asuntos en orden antes de morir (v. 1). Fue inusual que Isaac sólo llamara a Esaú (vv. 2–4). Normalmente, un padre reuniría a todos sus hijos para una ocasión como ésta (ver Génesis 49; 50:24–25). Quizás Isaac quería asegurarse de bendecir sólo a Esaú y no dejarle nada a Jacob.
Rebeca escuchó el plan de su marido y lo contrarrestó con el suyo. Ella convenció a Jacob de que se hiciera pasar por Esaú para robarle su bendición (vv. 5–13). Jacob se vistió con la ropa de su hermano, trajo comida y se puso pelo de cabra en los brazos y el cuello para engañar a su padre (vv. 11–17). Cuando su padre le preguntó directamente: “¿En serio eres mi hijo Esaú?” (v. 24). Jacob respondió: “Claro que sí” (v. 24).
Isaac continuaría bendiciendo a Jacob, marcándolo como aquel a quien se le otorgaría la bendición de Abraham (vv. 27–29). Esaú perdería su posición en la familia, su responsabilidad y su seguridad. Sin embargo, las cosas tampoco salieron del todo como Rebeca lo había planeado. Jacob se vería obligado a huir para salvar su vida. Rebeca nunca volvería a ver a su hijo favorito. Hicieron todo esto para obtener una bendición que Dios había prometido que llegaría a Jacob de todos modos (Génesis 25:23).
Ora con nosotros
Qué advertencia tan sombría nos da la lectura de hoy. Dios Todopoderoso, oramos para que la historia del hogar fracturado de Isaac y Rebeca nos impulse a buscar la paz, el amor, la unidad y la honestidad en nuestras familias, iglesias, lugares de trabajo y comunidades.