Los símbolos de Venus y Marte, originalmente asociados con los planetas, han recorrido un largo camino desde la antigüedad. Utilizados por griegos y romanos para designar divinidades, estos símbolos evolucionaron hasta representar lo masculino y lo femenino en la biología, gracias a la obra de Carl Linneo. En este episodio de Escuela Secreta, exploramos cómo esos mismos símbolos han sido recontextualizados, incorporando nuevas interpretaciones, como su uso en la representación de orientaciones sexuales. Badía nos platica sobre cómo el conocimiento y los símbolos cambian con el tiempo, revelando quiénes somos y cómo entendemos el mundo.