Aunque son invisibles, las heridas de la infancia dejan una profunda huella en la vida de toda persona, reconocerlas, sin duda, es un gran paso, sin embargo, nos puede surgir una duda, ¿estas heridas se pueden transmitir a los hijos?

Para resolver esta cuestión, Andrea Vargas y Adelaida Harrison platican con la terapeuta y escritora Anamar Orihuela, quien explica, puntualmente, cuáles son las heridas de la infancia, cómo se pueden trascender y, sobre todo, cómo éstas repercuten en los hijos.

Las heridas de la infancia son abandono, humillación, rechazo, traición e injusticia y son tan sutiles, que no es fácil reconocerlas, por ello, Anamar, ofrece herramientas para aprender a identificarlas e iniciar un camino de autoconocimiento que te lleve a mejorar tu vida y las relaciones con tus seres queridos. 

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