El cliente busca un inhibidor, suponemos que para desinhibirse. Además, hoy hay descuentos de un céntimo sobre todos los productos así que, si no tiene miedo, seguro que encuentra uno de amplio espectro. El problema es que el dependiente ha perdido los ojos, se le han ido con un bulto… uno un tanto… exuberante. Es que claro, con esos mensajes de whatsapp, con esos bultos, ¡no hay quién se concentre!
Es posible que el cliente se vaya con lo puesto, con bulto, pero sin inhibidor y dejando al dependiente ciego. Y con los calzoncillos de Ryan Gosling.