Hablan, hablan y hablan sin esperar respuesta alguna. Muchas cuentas en las redes sociales son puras cajas de resonancia de notas de prensa, teletipos automáticos y comunicados oficiales. Su única forma de dialogar es el monólogo; nada les interesa más que escucharse a ellos mismos. Aún así, muchas veces por lo que representan, obtienen miles de seguidores. Es mejor dejarles hablar solos a que interrumpan con sus ruidos el resto de trinos del bosque.