Empezamos un programa cargadito de noticias. Un carrusel que empezamos con la disculpa del arzobispo de Madrid, José Cobo, que, como máximo representante de la Iglesia madrileña, ha expresado un "lo sentimos profundamente", mientras reconocía "que ha habido abusadores dentro de la Iglesia". Cobo ha asegurado que "nos ha costado reconocerlo" pero ha evitado todo tipo de excusas remarcando que el hecho de que los haya en otros sitios "no nos sirve de ningún consuelo".
Seguimos con los delitos: la Fiscalía Anticorrupción ha pedido al Tribunal Supremo que impute al exministro de Transportes José Luis Ábalos, al considerar que existen indicios de delito por su presunta intervención en el denominado caso Koldo. Aprecia indicios de la comisión de presuntos delitos de cohecho, tráfico de influencias y organización criminal y se fundamenta en el último informe de la UCO, en el que se señala su "papel relevante y de responsabilidad" en la trama de presuntas irregularidades en la adjudicación pública de contratos de mascarillas en plena pandemia.
Mientras, en Madrid, ha habido una manifestación durante el fin de semana contra Pedro Sánchez para pedir que se convoquen elecciones generales. Muy original.
El tema del día lo dedicamos al archiconocido Ozempic, y no solo: No todos los medicamentos que se están usando para la reducción de peso se llaman Ozempic, sino que tienen diferentes nombres y cada vez están apareciendo más. A todos se les llama Ozempic por la misma razón que llamamos Kleenex a los pañuelos de papel que es, de hecho, como puede conseguirse en algunos países como EEUU. El periódico The Wall Street Journal explicaba cómo las élites de EE.UU. están accediendo al fármaco fuera de su indicación oficial: “Es el fármaco de Hollywood”. Uno de los casos más llamativos ha sido el de Elon Musk, CEO de Twitter y director de Tesla, El 16 de noviembre el empresario afirmaba en su red social que había perdido 13 kilos gracias a la combinación de ayuno, Ozempic/Wegovy y mantenerse lejos de comida sabrosa. También las Kardashian, Kelly Clarkson o Oprah Winfrey han admitido tomar variantes de este fármaco.