"La velocidad con la que se propagó el incendio en la fachada del edificio de Campanar nos ha sorprendido a todos". Quien habla es José Sancho, propietario de la empresa Front Panel que ha suministrado paneles de composite a los edificios más importantes de Valencia y el resto de España en los últimos 30 años. 

Aunque su empresa no fue la responsable de la fachada de la finca en cuestión, sí ha trabajado en ella "realizando labores de reparación". Al mismo tiempo, Sancho refiere otros edificios a los que les ha suministrado material de similares características. La Torre de Francia, en Valencia, latorre del Hotel Hilton, el Gemini Center o el Edificio Avis son algunos de ellos. 

Sin embargo, para el director técnico, las placas del revestimiento, por sí mismas. "Yo veo imposible que se produzca un incendio así solo por el composite. No tiene sentido". El viento que sopló en la tarde de ayer y el poliuretano proyectado sobre la fachada por debajo del revestimiento podrían haber acelerado la propagación del incendio porque el polietileno que hay entre las planchas de aluminio "es combustible, pero no inflamable". 

No todos los edificios que tienen un revestimiento metálico están en la misma situación. Por un lado, "hace tiempo que no hago una fachada que lleve el poliuretano proyectado, siempre llevan una lana de roca o una lana mineral" y, por el otro, la normativa vigente desde 2017 (tras el incendio de la torre Grenfell de Londres) obligó a cambiar la composición de las placas de composite. Ahora llevan un núcleo de un material llamado FR que, en caso de incendio, "no suelta llama, tiene una baja emisión de humo y no suelta esas gotas que sí tenía el composite que se colocaba anteriormente". Un material que cumplía con la clasificación M1 que quiere decir que es combustible, pero no inflamable.

Lo que es evidente es que "esta forma de arder nos ha sorprendido a todos los que nos dedicamos a este tema y pone en cuestión muchas de las teorías que hemos estudiado"

Ante la preocupación de muchos de los vecinos de edificios con paneles en su fachada, José Sancho reconoce haber recibido, a lo largo de la mañana, de un buen número de solicitudes de certificados de los materiales utilizados. ¿Y qué se puede hacer si nuestro edificio tiene un revestimiento similar al de la finca de Campanar? "Levantar toda la fachada y rascar todo ese poliuretano proyectado". Una obra que, para un edificio como el de la Torre de Francia podría superar los 3 millones de euros de coste. 

"La velocidad con la que se propagó el incendio en la fachada del edificio de Campanar nos ha sorprendido a todos". Quien habla es José Sancho, propietario de la empresa Front Panel que ha suministrado paneles de composite a los edificios más importantes de Valencia y el resto de España en los últimos 30 años. 
Aunque su empresa no fue la responsable de la fachada de la finca en cuestión, sí ha trabajado en ella "realizando labores de reparación". Al mismo tiempo, Sancho refiere otros edificios a los que les ha suministrado material de similares características. La Torre de Francia, en Valencia, la torre del Hotel Hilton, el Gemini Center o el Edificio Avis son algunos de ellos. 
Sin embargo, para el director técnico, las placas del revestimiento, por sí mismas. "Yo veo imposible que se produzca un incendio así solo por el composite. No tiene sentido". El viento que sopló en la tarde de ayer y el poliuretano proyectado sobre la fachada por debajo del revestimiento podrían haber acelerado la propagación del incendio porque el polietileno que hay entre las planchas de aluminio "es combustible, pero no inflamable". 
No todos los edificios que tienen un revestimiento metálico están en la misma situación. Por un lado, "hace tiempo que no hago una fachada que lleve el poliuretano proyectado, siempre llevan una lana de roca o una lana mineral" y, por el otro, la normativa vigente desde 2017 (tras el incendio de la torre Grenfell de Londres) obligó a cambiar la composición de las placas de composite. Ahora llevan un núcleo de un material llamado FR que, en caso de incendio, "no suelta llama, tiene una baja emisión de humo y no suelta esas gotas que sí tenía el composite que se colocaba anteriormente". Un material que cumplía con la clasificación M1 que quiere decir que es combustible, pero no inflamable. Lo que es evidente es que "esta forma de arder nos ha sorprendido a todos los que nos dedicamos a este tema y pone en cuestión muchas de las teorías que hemos estudiado"
Ante la preocupación de muchos de los vecinos de edificios con paneles en su fachada, José Sancho reconoce haber recibido, a lo largo de la mañana, de un buen número de solicitudes de certificados de los materiales utilizados. ¿Y qué se puede hacer si nuestro edificio tiene un revestimiento similar al de la finca de Campanar? "Levantar toda la fachada y rascar todo ese poliuretano proyectado". Una obra que, para un edificio como el de la Torre de Francia podría superar los 3 millones de euros de coste.

El daily de Plaza con los temas de actualidad analizados en profundidad.

Advertisement