Es imposible describir el inicio de este episodio. Tampoco es fácil analizar cómo han llegado hasta aquí los Suns de Frank Vogel. Barrido absoluto de Minnesota ante Phoenix, que maltratan un proyecto que solo podía tener como objetivo ganar ya el anillo. ¿Es el momento para dejar de confiar definitivamente en los megaequipos? ¿Qué pasa con Kevin Durant? ¿Por qué Devin Booker está tan lejos de su versión como candidato al MVP? Es muy difícil pensar en que podían conseguir una rotación mejor a la que tienen, y dilapidar al entrenador no es la única solución porque hay mucha estrella que debe asumir responsabilidades. No queda mucha duda de que Anthony Edwards va a liderar la NBA, el Dream Team de París y todo lo que quiera antes que Devin Booker.
En Nueva York han encontrado a su rey, a Jalen Brunson, a un jugador que controla todo lo que pasa y que domina sobre la pista con un nivel competitivo realmente emocionante. Cuesta entender cómo son capaces estos Knicks de sobreponerse a cualquier contratiempo y siempre encontrar a otro jugador que luche por ese rebote, que ponga ese tapón o anote ese triple decisivo para que estén dominando la eliminatoria ante los Sixers de todo un MVP como Joel Embiid, que vuelve a quedarse sin recursos en los momentos finales de estos partidos. Es curioso cómo su comparación está más cercana a Draymond Green que a Nikola Jokic.
Ya era hora de tomar la decisión en Los Angeles Clippers de jugar sin Kawhi Leonard si no está realmente bien físicamente. Les va mejor a todos los niveles. Empieza a decepcionar Dallas, que si consigue pasar de ronda se enfrentará ante unos Oklahoma City Thunder arrolladores. Influye que Luka Doncic también está lesionado, acumula faltas y se ve superado por James Harden. Aunque sigan apareciendo los milagros de Kyrie Irving, no son suficientes y llegan cuando los Mavericks ya pierden por 31 puntos. Solo pedimos que la sociedad tenga con nosotros la paciencia que tiene toda la NBA por jugadores 3-and-D como Josh Green.
Y de alguna manera se ha llegado al final de este episodio sin mencionar un partido histórico, el que ha acabado con la racha incomprensible de Denver Nuggets y Los Angeles Lakers. La serie no acabará en 4-0, y cuidado si se confirma la ausencia de Jamal Murray. Mucho cuidado.