Rosario Mellado es quizá la única mujer en el cono sur dedicada a la luthería de arcos para cuerdas frotadas. Su dedicación a este trabajo en madera viene desde muy pequeña, cuando después del colegio trabajaba en el taller de su padre. Hoy sus manos van urdiendo pelo por pelo los crines, que junto al nácar, el oro y el marfil conformarán un nuevo arco. Todo esto desde su propio taller.