Fue, junto a Fátima Gálvez, la primera medalla de oro española en Tokio hace tres años. Entonces, en pareja mixta; ahora, en solitario, igual que en sus cuatro participaciones anteriores, Alberto Fernández Muñoz (Madrid, 1983) aspira en París a su primer podio olímpico individual tras lograr en el último cartucho, el Campeonato de Europa, su pase a París 2024.

El balance de estos tres años es desalentador en la vía deportiva: “No me ha cambiado nada ser campeón olímpico, ni en cuanto a visibilidad ni en cuanto a patrocinadores”, confiesa. Decepción que que contrarresta su vida personal: “Sí me ha cambiado por ser papá”.

Quien ha seguido su carrera sabe que se maneja como nadie en el filo de la navaja, para ejemplo, la final olímpica: “Creo que fue de las mejores tiradas de mi vida”, la tarde perfecta, el día indicado. 

Ahora, pese a sus tres títulos mundiales, no se obsesiona con su primer metal olímpico en competición individual: “¿Quiero la medalla? Sí. ¿La necesito? No. ¡Y menos tras lo visto después de Tokio. Si no la consigo, voy a seguir igual de tranquilo”, insistiendo en la poca repercusión que ha tenido su deporte más allá del boom tras el oro en Ariake.

Fue, junto a Fátima Gálvez, la primera medalla de oro española en Tokio hace tres años. Entonces, en pareja mixta; ahora, en solitario, igual que en sus cuatro participaciones anteriores, Alberto Fernández Muñoz (Madrid, 1983) aspira en París a su primer podio olímpico individual tras lograr en el último cartucho, el Campeonato de Europa, su pase a París 2024.
El balance de estos tres años es desalentador en la vía deportiva: “No me ha cambiado nada ser campeón olímpico, ni en cuanto a visibilidad ni en cuanto a patrocinadores”, confiesa. Decepción que que contrarresta su vida personal: “Sí me ha cambiado por ser papá”.
Quien ha seguido su carrera sabe que se maneja como nadie en el filo de la navaja, para ejemplo, la final olímpica: “Creo que fue de las mejores tiradas de mi vida”, la tarde perfecta, el día indicado. 
Ahora, pese a sus tres títulos mundiales, no se obsesiona con su primer metal olímpico en competición individual: “¿Quiero la medalla? Sí. ¿La necesito? No. ¡Y menos tras lo visto después de Tokio. Si no la consigo, voy a seguir igual de tranquilo”, insistiendo en la poca repercusión que ha tenido su deporte más allá del boom tras el oro en Ariake.

Este 2024 tenemos los Juegos Olímpicos de París. Para que disfrutes más y mejor de la cita olímpica, desde el Universo MARCA lanzamos este podcast que te acompañará semanalmente durante la previa y de forma diaria durante la cita olímpica. 

Este 2024 tenemos los Juegos Olímpicos de París. Para que disfrutes más y mejor de la cita olímpica, desde el Universo MARCA lanzamos este podcast que te acompañará semanalmente durante la previa y de forma diaria durante la cita olímpica.

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