A finales del siglo XIX echó a correr una palabra por callejones oscuros y garitos de mal vivir. Esa palabra era golfo y describía a los que se desviaron de la moral del arte y la ciencia, a aquellos desagregados de la ciencia social. O al menos lo describía así Bernaldo de Quirós. Por la mala vida entran siempre muchas palabras nuevas. Entran sin ley, de improviso. Pio Baroja fue uno de los primeros que llevó la palabra golfo a un texto escrito.
No seas golfo y dale al play para descubrir la historia que esconde esta palabra