Estados Unidos dio un paso decisivo en la carrera tecnológica: el Departamento de Defensa lanzó AI-Mil, una plataforma de inteligencia artificial generativa que promete transformar desde la burocracia militar hasta las decisiones tácticas en el campo. Una herramienta poderosa… y también polémica, porque abre el debate sobre quién controla la tecnología y cómo evitar que se use para la guerra. En La Nube, analizamos el impacto, los riesgos y lo que significa esta apuesta del Pentágono en la competencia global por la IA.