Después de tres meses de hambre y frío y sin pisar tierra, surcando el Pacífico, las tres naos que restan de la armada fondean frente a dos islotes deshabitados. Pasará aún un mes más hasta que alcancen la primera isla habitada, donde podrán reponer fuerzas y confirmar que llegar al mar de la Especiería siguiendo esa derrota es posible.