En este nuevo episodio Jorge Cuevas (El Buscalocos) se sincera: tiene una procesofilia. ¿Y qué es eso? Se preguntarán. Pues muy fácil, es un proceso que, al realizarlo, produce máximo placer. La procesofilia de Jorge Cuevas es que le encanta levantarse por las mañanas, prepararse un café expresso y comer una rebanada de pan con mermelada orgánica. Es su procesofilia mañanera.
Pero existen muchos tipos de procesofilias, como aquel señor que lleva 50 años regalando una rosa cada lunes a su mujer. O las canciones que suenan una y otra y otra vez en la radio. O la bailarina de ballet que lleva 20 años haciendo la misma función. Esto está muy bien, es un proceso que lo han practicado tanto, que ya lo domina. Pero claro, todo proceso al final acaba volviéndose mecánico y a uno se le acaba secando el alma en el proceso.
Hay que ser disrupto, no enamorarse de nada, tener capacidad para romper. Si no, es imposible que puedas innovar. ¡Hay que crear a partir de la destrucción!