Lee Rut 3:14–18 

¿Alguna vez has estado tan emocionado por lo que traerá el día siguiente que te despiertas rápido y ansioso por comenzar? Ese era el estado de ánimo de Rut y Booz la mañana siguiente a su visita. Rut se despertó antes del amanecer para hacer el viaje a casa al amparo del alba sin que nadie la viera. Booz le advirtió que mantuviera su visita en secreto por el momento. Si bien ella tomó la iniciativa de acudir a él, ahora él tomó la iniciativa de proteger y guardar su plan.

Antes de irse, Booz le dio un regalo. Él llenó su manto con cebada, otro acto más de hesed, y un símbolo de su compromiso tanto con Rut como con Noemí. Cuando Rut llegó a casa, Noemí estaba esperando un informe. El autor resume la respuesta de Rut simplemente haciéndole saber al lector que Rut le contó a Noemí “todo” (v. 16).

Una línea específica de su diálogo es muy intencional. Ruth añadió: “Me dio estos veinte kilos de cebada, y me dijo: ‘No debes volver a tu suegra con las manos vacías’” (v. 17). Sin duda, el uso de la palabra “vacías” comunica una inversión clave con respecto al vacío que había sentido Noemí. En 1:21 les dijo a las mujeres de Belén: “Me fui con las manos llenas, pero el SEÑOR me ha hecho volver sin nada”. Rut escuchó y sintió su profunda desesperación.   

Ahora Rut tuvo el gozo de llevar la plenitud a su suegra, en primer lugar, físicamente en forma de más comida. Pero había mas por venir. Confiaron sin reservas en Booz. Noemí expresó esa confianza y animó a Rut a esperar pacientemente. Booz ahora ocuparía un lugar central. Sus próximas acciones mostrarían la provisión de Dios a favor de ellas.
Dios puede actuar rápidamente, a veces revirtiendo una situación preocupante en un solo momento. Considera los problemas a los que te enfrentas y que no se sienten resueltos. Puedes confiar en que Dios llenará y satisfará tus necesidades. Puede suceder con un cambio repentino, pero si no, ten por seguro que Dios está presente y sostiene tu futuro.

Lee <a href="https://www.biblegateway.com/passage/?search=Rut+3%3A14%E2%80%9318%C2%A0&amp;version=NVI">Rut 3:14&ndash;18&nbsp;</a>
&iquest;Alguna vez has estado tan emocionado por lo que traer&aacute; el d&iacute;a siguiente que te despiertas r&aacute;pido y ansioso por comenzar? Ese era el estado de &aacute;nimo de Rut y Booz la ma&ntilde;ana siguiente a su visita. Rut se despert&oacute; antes del amanecer para hacer el viaje a casa al amparo del alba sin que nadie la viera. Booz le advirti&oacute; que mantuviera su visita en secreto por el momento. Si bien ella tom&oacute; la iniciativa de acudir a &eacute;l, ahora &eacute;l tom&oacute; la iniciativa de proteger y guardar su plan.
Antes de irse, Booz le dio un regalo. &Eacute;l llen&oacute; su manto con cebada, otro acto m&aacute;s de hesed, y un s&iacute;mbolo de su compromiso tanto con Rut como con Noem&iacute;. Cuando Rut lleg&oacute; a casa, Noem&iacute; estaba esperando un informe. El autor resume la respuesta de Rut simplemente haci&eacute;ndole saber al lector que Rut le cont&oacute; a Noem&iacute; &ldquo;todo&rdquo; (v. 16).
Una l&iacute;nea espec&iacute;fica de su di&aacute;logo es muy intencional. Ruth a&ntilde;adi&oacute;: &ldquo;Me dio estos veinte kilos de cebada, y me dijo: &lsquo;No debes volver a tu suegra con las manos vac&iacute;as&rsquo;&rdquo; (v. 17). Sin duda, el uso de la palabra &ldquo;vac&iacute;as&rdquo; comunica una inversi&oacute;n clave con respecto al vac&iacute;o que hab&iacute;a sentido Noem&iacute;. En 1:21 les dijo a las mujeres de Bel&eacute;n: &ldquo;Me fui con las manos llenas, pero el&nbsp;SE&Ntilde;OR&nbsp;me ha hecho volver sin nada&rdquo;. Rut escuch&oacute; y sinti&oacute; su profunda desesperaci&oacute;n.&nbsp;&nbsp;&nbsp;
Ahora Rut tuvo el gozo de llevar la plenitud a su suegra, en primer lugar, f&iacute;sicamente en forma de m&aacute;s comida. Pero hab&iacute;a mas por venir. Confiaron sin reservas en Booz. Noem&iacute; expres&oacute; esa confianza y anim&oacute; a Rut a esperar pacientemente. Booz ahora ocupar&iacute;a un lugar central. Sus pr&oacute;ximas acciones mostrar&iacute;an la provisi&oacute;n de Dios a favor de ellas.
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<li>Dios puede actuar r&aacute;pidamente, a veces revirtiendo una situaci&oacute;n preocupante en un solo momento. Considera los problemas a los que te enfrentas y que no se sienten resueltos. Puedes confiar en que Dios llenar&aacute; y satisfar&aacute; tus necesidades. Puede suceder con un cambio repentino, pero si no, ten por seguro que Dios est&aacute; presente y sostiene tu futuro.</li>
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Un estudio bíblico devocional diario del Instituto Bíblico Moody.

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