El cúmulo de planetas que avanzan por el signo de cáncer apunta a la presencia de unos días cargados de emociones y de sentimientos que pueden rebasar las fronteras de lo razonable. Es un periodo perfecto para valernos de herramientas que nos permitan resonar en tonalidades altas y trascendentales.
Como la Luna está en el último tramo de su ciclo mensual, vale la pena aprovechar este margen de tiempo para diluir aquello que nos preocupa. La clave se centra en entender que no es necesario armar un drama, o llevar las cosas a extremos; sino simplemente realizar un clic mental y encontrar así el cauce del equilibrio interior.
El presente horóscopo cuenta con todos los detalles propios del movimiento de la Luna para cada persona según el signo de nacimiento, lo que permite evidenciar la presencia de días positivos para unas u otras actividades.