Carolina Rogers había sido asaltada en su propio coche por un desconocido que la amenazó de muerte si no seguía sus instrucciones: debe recoger una cantidad de dinero y entregársela. Si lo hace, la recompensará con una importante suma de dinero. Pero Carolina acude a la comisaría de policía y allí, el inspector Hopkins le aconseja no decir nada a nadie: ni a su familia ni a sus amigos y seguir con el plan indicado.
Suena el teléfono en su apartamento de Nueva York, una respiración profunda suena en el otro extremo de la línea, luego se corta la comunicación. Carolina teme que su asaltante haya averiguado que acudió a la policía a contarlo todo. Unos arañazos suenan en la puerta. Carol está paralizada del terror, los crujidos continúan en el cerrojo, agarra un cuchillo, la puerta va a abrirse...
Guion: Pablo de Aldebarán
Equipo artístico:
Javier Loyola
Eduardo Martínez
Rosa María Belda
Narrador: Narciso Ibáñez Serrador
Este es el segundo episodio de cuatro del relato Peligro en la noche.