



Balvenie: El arte de lo hecho a mano
En un mundo de automatización, Balvenie sigue cultivando su cebada, malteando sobre piedra y cuidando cada barrica como una joya. En este episodio, exploramos el single malt que honra la tradición con cada gota: cálido, especiado y profundamente humano.

Oban: Donde el mar encuentra a las Highlands
Entre el acantilado y el puerto, Oban destila equilibrio. Con su carácter costero, su dulzura malteada y un susurro de humo, este whisky conecta continente e isla en un solo trago. En este episodio, exploramos una de las destilerías más pequeñas… y más grandes en alma.

Highland Park: El equilibrio del norte
Nacido entre turba, brezo y viento vikingo, Highland Park es el arte del balance en forma de whisky. Ni demasiado dulce, ni demasiado ahumado: es armonía en cada trago. En este episodio, exploramos el alma elegante y rebelde del single malt más septentrional de Escocia.

Talisker: El alma marina de Escocia
Talisker nace en la isla de Skye y lleva en cada sorbo el viento, la sal y la piedra del Atlántico. No es un whisky para gustar a todos, es un whisky que deja huella. Firme, picante, costero. En este episodio exploramos su carácter indomable y su elegancia salvaje.

Glenlivet: El origen de la elegancia escocesa
Fue el primero en legalizarse, y el primero en marcar un estilo. Glenlivet definió el perfil del single malt de Speyside: suave, floral y refinado. En este episodio descubrimos cómo una decisión valiente en 1824 dio origen a uno de los whiskys más influyentes del mundo.

Laphroaig: El whisky que no se olvida
Medicinal, salado, brutalmente honesto. Laphroaig es la turba en su máxima expresión. No busca ser amable: busca ser inolvidable. En este episodio exploramos el single malt que divide opiniones y conquista lealtades con cada sorbo.

Glenfiddich: El single malt que cambió las reglas
Desde Speyside al mundo, Glenfiddich fue el primero en apostar por el single malt como marca global. Una destilería familiar, pionera y fiel a su esencia, que definió un estilo y conquistó millones de copas con elegancia, precisión y carácter.

Ardbeg: Intensidad que no pide permiso
En Islay, entre turba y sal, nace un whisky que no busca gustar: busca impactar. Ardbeg es humo, poder y profundidad. Una destilería que convirtió la intensidad en arte, y el carácter en culto.

Lagavulin: Fuego, mar y carácter puro
En este episodio nos sumergimos en el alma ahumada de Islay. Lagavulin no es un whisky para cualquiera: es mar, turba, sal y profundidad. Una destilería que no se adapta, impone. Y que transforma cada sorbo en una experiencia inolvidable.

Macallan: El lujo nacido en Speyside
Desde una granja escocesa hasta subastas millonarias, Macallan redefinió el concepto de single malt. Su obsesión por el detalle, sus barricas de jerez y su estética silenciosa lo convirtieron en símbolo de lujo y elegancia. Un whisky que no se produce… se cría.