Un campo de golf, un hombre con un fusil de asalto y el servicio secreto. Por segunda vez en dos meses, parece que estamos ante otro intento de asesinato de Donald Trump. Dadas las circunstancias, la pregunta es qué clase de coctel explosivo hay en Estados Unidos para que estemos asistiendo a esto. Lo analizamos con Pablo R. Suanzes, corresponsal de EL MUNDO en Washington