La caída de Íñigo Errejón está provocando toda una serie de episodios de contradicciones entre sus compañeros. Todo por las preguntas que quedan (y no resuelven) sobre cómo actuaron en los casos de violencia y acoso sexual que han salido a la luz. Su entorno político conocía denuncias previas, por lo menos una. Lo sabían y no hicieron nada o no hicieron lo suficiente. ¿Estamos ante el fin de Sumar? Lo analizamos con Luis Fernando López, redactor jefe de EL MUNDO