Los conciertos de Michael Jackson en Wembley de 1988, parte de la gira Bad, siguen siendo legendarios. Actuaciones inolvidables, una coreografía icónica y una producción escénica masiva cautivaron a millones. La energía era eléctrica, mostrando el incomparable talento artístico de Jackson. "Man in the Mirror", "Billie Jean" y "Bad" son solo algunos de los momentos destacados de estos conciertos icónicos, inmortalizados en grabaciones en vivo. Un testimonio de su estatus de superestrella global.