Fumar puros no es tan común como fumarse un cigarrillo al uso o uno de esos vapeadores que se han puesto tan de moda. Fumarse un puro es algo diferente, es algo especial, con clase. Y lo que siempre ha estado, más o menos, al alcance de todos, ahora se ha convertido en misión imposible. Porque sí, puros hay muchos, pero los que saben de verdad lo que se están fumando son aquellos que eligen los habanos. Edita y presenta Belén Montes. Participan Carlos Fernández, director de la mejor cava de Madrid -Calle Magallanes 16-, y Ramón Pérez-Maura, fumador de un puro diario desde hace 30 años.