Existen dos grandes fuerzas que gobiernan el universo: el miedo y el amor. Usualmente realizamos nuestras elecciones porque queremos acercarnos a aquello que nos hace sentir amados y alejarnos de todo lo que nos genere miedo o incertidumbre. Escoger una profesión es uno de esos grandes dilemas que se presentan a muy temprana edad, en el cuál el miedo a fallar eligiendo la carrera “correcta” suele direccionarnos a profesiones que sean socialmente aprobadas, bien vistas o tengan una buena remuneración. Sin embargo, esta conducta se puede afianzar en nuestra adultez conduciéndonos a frustración, falta de energía y poca motivación, pregúntate ¿Desde donde estas viviendo? ¿Desde el miedo o desde el amor?

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